Dianas farmacológicas contra el ictus cerebral
Unos años antes ya había hablado con unos investigadores sobre el ictus cerebral. Fue un poco después de que le diera uno a Jaime de Marichalar, lo cual fue un caso sonado por lo conocido del personaje y por la juventud del mismo.
En aquella ocasión me hablaron de la aspirina como un posible fármaco para predecir la enfermedad. El problema evidente es lo fuerte que es la aspirina para el estómago, así que los investigadores siguen buscando fármacos que sirvan para todo el mundo.
En el artículo que aquí aparece se trata más bien de buscar posibles dianas terapéuticas a posteriori de que se produzca un ictus. Dianas que además sean correctas y que hagan que el fármaco tenga el efecto deseado.
Ahora que he tenido un caso de ictus en la familia he descubierto que una de cada seis personas en el mundo sufrirá esta enfermedad. Y mucho más en el que llamamos primer mundo, sobre todo porque la vida se alarga hasta límites insospechados y el ictus se ceba con las personas de mayor edad.
Este artículo se publicó en el número 39 Tribuna Complutense, con fecha 4 de abril de 2006.